OTAKUSUITE – Eggs (ALBUM REVIEW)

OTAKUSUITE – Eggs (ALBUM REVIEW)

Otra joya italiana entregada por Argonauta Records! Vaya que han tenido buen tino con sus últimas contrataciones; el mismo día en que editaban a nivel mundial a los post-metal Naat, lanzaron el álbum debut de este power trío italiano – originario de la ciudad de Pisa – compuesto por Marcos Rovini en guitarra, Elia Petrosino en la batería y Dario Donati (Il Lupo) al mando del bajo.

Argonauta nos advierte antes de darle play al álbum que Otakusuite crea una “inteligente fusión de elementos stoner, jazz rock y sicodelia con sonidos progresivos.” En otras ocasiones siempre discrepo respecto a las etiquetas dadas por los sellos, mas esta vez fue la excepción: he escuchado el disco repetidas veces y si: en la paleta de colores de la banda hay stoner, rock progresivo, funk, sicodelia y hasta country atmosférico! Pero no crean que es un copy-paste antojadizo.

Antes de aclarar lo anterior, importante es aclarar algo desde ya: el disco es buenísimo! Posee una increíble calidad compositva, la forma en que ensamblan las distintas piezas que constituyen la canción denota un exquisito gusto, tanto por las oportunidades escogidas en que tocan los quiebres, las variaciones de momentos intensos a partes más jazzeras o cuando la guitarra pisa pedal para sacar un rasgado más rockero con algo de fuzz – ahí se empareja con el stoner, pero musicalmente no apuntan a eso – y el tino con el que armaron la mezcla final, hace de este “Eggs” un álbum completo y disfrutable.

Párrafo aparte merece el bajo: suena gigante, justo al medio de la equalización, tocado con maestría y pasión. Las cuerdas parecen lubricadas con aceite para motos: suenan gruesas, con acento en la pulsación y cuando aplica efectos suenan “desérticas”. La batería de Petrosino queda al debe en cuanto a la exhibición de virtuosismo, pero compensa con notable habilidad el acompañar con precisión la ejecución de Rovini y Donati, mostrando que tiene el corazón en el lugar correcto para no desentonar el gabinete de emociones que exhibe cada canción.

Volviendo al estilo, lo que tocan estos tanos es un jazz rock netamente instrumental, en la mejor descripción y esencia del término: temas largos, con espacio para que cada instrumento destaque pero sin esos torbellinos de improvisación propios del free jazz, sino que bajo los códigos clásicos del rock. Lo progresivo a lo que alude el sello se materializa principalmente en la yuxtaposición de distintas ideas musicales dentro de cada tema y los quiebres de tonalidades más luminosas, sin embargo se aprecia que estos muchachos privilegian más la construcción de la canción y las emociones que canalizan, más que exhibir sus dotes musicales, por ende no los calificaría de progresivos; este rasgo como les comento corresponde más a una consecuencia que obtienes cuando tocas jazz rock con inspiración y cierta habilidad técnica.

Como referencia musical de comparación, se asemejan bastante a Ozric Tentacles, excluyendo claro la parte espacial, electrónica y (en este caso si) progresiva de estos últimos; cuando el power trío toca más rock y menos jazz, rememoran a los Grand Funk Railroad, en especial por ese toque minimalista. Pero surgen estas referencias como influencias, puesto que este grupo posee la originalidad necesaria para diferenciarse de cualquier otra. De hecho en algunas canciones le agregan un toque country a la ejecución que realmente los distingue.

“Chicken Caravan Deluxe” arranca con un riff en guitarra muy Grand Funk de su primera época (“On Time”, 1969) para luego desembocar en un jazz rock de exquisita factura, con un riff ahora muy funk. El tema es excelente, se apodera de tu atención y te lleva de la mano por todos los paisajes de este viaje sónico. Le sigue “Manannan Mac Lir”, también con una intro guitar riff muy suave y minimalista, que me recordó a la forma de tocar de Mike McCready (si, me evocó al Pearl Jam más contemplativo) para luego ceder protagonismo a los demás instrumentos. Este tema es el más representativo de OtakuSuite y de este disco, pues exhibe sus 4 aristas de forma muy marcada: I. Intro suave y minimalista, II. Estrofa jazzera – en esta canción surge la influencia de Yes -, III. Parte rockera más pesada, con fuzz y alma stoner, y IV. Sección final más sicodélica, con un ritmo marcial, de nuevo, muy Grand Funk que deriva luego de un descenso en las revoluciones en un vaiven de espera en guitarra. Una delicia musical, y es sólo el segundo tema del álbum!

“Y.E.S. (Your Endless Serendipity)” parte esta vez con una cálida suite de jazz, que se ve interrumpida con un riff sencillo en guitarra acompañada con decisión por el bajo y la batería – aquí el batero se luce en sacarle partido a su kit, bastante sencillo por lo demás – para dar paso a un arpegio alegre e inocente en guitarra muy propio del Yes de la era “Fragile” (1971) que luego de un rato evoluciona a un riff más rockero y “stoner” que en una marcha cíclica retorna al arpegio antes descrito. Pura belleza musical.

“Killer Monk” es el tema más corto del disco: en un poco más de dos minutos, te sacude con un rockabilly melódico, adornado por un breve solo más stoner.

“Country cousins meet the Wolf” inicia suave con un fraseo jazzero, que evoluciona a una pieza de aire country fusionada con jazz! Nunca había escuchado antes algo como esto, quizás lo más parecido sería el sonido desértico/espacial de Kyuss en el “Blues from the Red Sun” (Dali Records, 1992) y que evoluciona justamente a un stoner rock intenso pero no por ello menos colorido con un un solo en fuzz muy inspirado.Con sus 11:09 minutos es el tema más largo del disco. “The Curse of the Bready Bready Flute” inicia con una intro jazzera la cual se ve interrumpida de golpe por un riff de guitarra más crudo, siempre acompañado hábilmente por un bajo, el cual brilla en este tema haciendo una línea continua completamente independiente al de la guitarra, queda incluso solo a momentos capitaneando la canción. Estas variaciones son de excelente factura: nunca pierdes la concentración, siempre te sorprenden con un arpegio, una nota más luminosa o un quiebre que puede ser intenso o suave.

Cierra “Inside Coin”, con la variación exhibida previamente entre secciones calmas y partes más rápidas, despidiéndose el álbum con un fading que te deja intrigado y con ganas de escuchar una continuación.

Otakusuite se daban a conocer antes como The Questionmarks, hasta el año 2017. Antes sólo habían lanzado el EP La Danza del Sole, grabando este álbum debut en el año 2018 pero no habían tenido la oportunidad de editarlo hasta luego de firmar con Argonauta. No les doy la nota máxima por una razón ridícula en apariencia, empero es de vital importancia: ¿Por qué llamarse “Otakusuite”? ¿Cuál es la idea – insisto – de usar la palabra OTAKU? ¿Alguna referencia, tributo o reconocimiento a la cultura Otaku? Porque en Chile al menos usamos la palabra otaku para referirnos a esa cultura juvenil urbana fanática de todos los productos culturales nipones y surcoreanos (manga, música, cine, etc), entonces, ¿Qué llevó a la banda de cambiarse – de un nombre ya malo como el que tenían al principio – a bautizarse como “Otakusuite”? Reconozco que decidí hacer el review por lo desopilante del nombre y por la referencia del sello a que cultivaban “sicodelia”, motivo en virtud del cual esperaba algo más estrambótico al estilo de bandas como Solefald, Igorrr o Fleurety, mas nada más alejado de la realidad, encontrándome con una banda más “seria” que lo que el nombre o el título del disco te induciría a pensar. Lo único “oriental” que encontré de ellos es la foto de portada de su perfil de facebook, donde sale un grabado japonés (¿?). En fin, nada más personal que un nombre propio, no?

Una lástima lo del nombre, de lo contrario tendrían la puntuación máxima. Si gustan de los estilos y bandas antes mencionados, denle una oportunidad y déjense llevar por el viaje ofrecido por Otakusuite, ignorando mientras dure este “Eggs” lo desconectado del nombre respecto del estilo y calidad desplegado por la banda. En una de esas los entrevistamos en Metal Addiction, puesto que son bastante desconocidos fuera de Italia, y la calidad les sobra.

TRACKLIST:

  1. Chicken Caravan Deluxe
  2. Manannan Mac Lir
  3. Y.E.S. ( Your Endless Serendipity )
  4. Killer Monk
  5. Country Cousins Meet the Wolf
  6. The Curse of the bready bready Flute
  7. Insert Coin

Calificación: 9 / 10

Gerardo
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